Ya son muchas las personas que han solicitado su preparado personal de Flores de Bach... y, en un porcentaje bastante alto, me he encontrado un problema común a todas ellas: La culpabilidad.
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La culpa encadena la libertad |
Y hablo de un tipo de sentimiento de culpa muy concreto, es el referente a sentirse culpable por sentirse mal... Me explico. Los tiempos díficiles y extraños que estamos viviendo en este país han colocado a las personas en una posición extremadamente delicada, ahora el conformismo es una práctica tan extendida como peligrosa y todo aquél que es poseedor del don, aleatorio y para nada equiparado a valía o experiencia, de un trabajo, debe dar gracias infinitas y parece no tener derecho a quejarse o pasar por malos momentos emocionales.
Da igual si tu jornada laboral es de 10 horas al día, o si el sueldo apenas llega para pagar hipoteca y poco más... estás trabajando y no tienes derecho a nada más.
Y a mi me resulta tan triste como paradójico, que actualmente todo se resuma a ésto y se haya creado un cortina espesa plagada de dudas y tristeza en torno a los sentimientos humanos y la calidad emotiva a la que todos tenemos derecho. Porque a la hora de explicar sus problemas, los que les han llevado a solicitar ayuda en las esencias florales, la boca se hace pequeña y la frase común es siempre la misma: "Pero no tengo derecho a quejarme, por lo menos tengo trabajo".
Estamos siendo testigos de una corriente de miedo generalizada. Miedo a perder el trabajo, miedo a reconocer las debilidades; lo que deriva en una enorme frustración cotidiana, limitando en extremo aspiraciones e ilusiones, los intentos de mejorar y buscar una vida mejor, más plena... no se permite soñar.
Los culpables no son las personas que cada día luchan contra el sueño, las terribles condiciones laborales que son consecuencia de aquellos que aprovechan las coyunturas económicas para exprimir al máximo a sus trabajadores, las facturas o las subidas de impuestos varios... No entraré en tema político puesto que no merece la pena, y me niego a dar más energía a la negatividad, de eso ya se ocupan a diario los medios de comunicación envenenando el ánimo a todos.
En lo que si entro es a defender el derecho de cada uno a necesitar más, a llorar porque el pánico al desempleo le oprime el pecho provocando crisis de ansiedad, a sentirse desbordado por las responsabilidades cotidianas, a que las dudas y el desconcierto le quiten el sueño, a ver pasar los días sin tener derecho a mayor aspiración que cumplir un horario, a ver frustrados sus sueños.
También en la baja autoestima, el agotamiento psicológico y físico que impide disfrutar de muchas cosas, la tristeza que no tiene motivo, los pensamientos negativos que se repiten como un disco rallado, la preocupación excesiva por el bienestar de otros, la falta de confianza, la desesperanza, la ansiedad, las fobias, los traumas no superados..... y tantas cosas que roban la alegría.
No te sientas culpable si, de repente, no puedes con todo... no eres una máquina. No te hagas el fuerte, tienes derecho a quejarte y buscar soluciones a los problemas, no todo se reduce a tener o no tener trabajo. Yo, por mi parte, ya he asumido que la flor base de cualquier mezcla de Flores de Bach que preparo debe contener Pino, ya que trata el sentimiento de culpa en todos sus matices y grados.
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